[Autoría: Ricard Cucurull]
J.J. Abrams i Spielberg se han quedado a medio camino entre la creación del nuevo clásico infantil de aventuras del siglo XXI y la reedición nostálgica de un clásico para treintañeros. No en vano esta película lleva el nombre del primer formato realmente pop de filmación. Aquí no es el alien, ni la panda, ni siquiera el proceso de iniciación a la vida adulta el rasgo principal del film. La nostalgia satura los colores, copa los guiños y conduce los temas. No se trata de crear el referente juvenil del siglo XXI, sino de agradar a los hijos de los treintañeros que van a ver Super 8 con un ejercicio onanista que poco tiene de autor y mucho de homenaje (hasta se ha hecho un comic promocional con el mismo estilo que el cartel de la película, muy parecido al de Encuentros en la Tercera Fase).
ET, los Goonies, Cuenta Conmigo, son ejemplos que vienen fácilemente a la cabeza cuando uno se mete en Super 8. El mérito de Abrams ha sido sobre todo enlatar el producto, aunque luchar contra la sombra alargada de Spielberg no le ha salido tan bien. Ambientar una tapadera militar en plena guerra fría en un pequeño pueblo de Ohio en 1979 y usar una pandilla de adolescentes quinceañeros para protagonizar la acción son ingredientes de cualquier producción de aventuras fantásticas que se precie, aunque aquí se adivina la mano de Spielberg moviendo los hilos. Acentuar el lado oscuro de la bestia y sostener el suspense, sin embargo, son virtudes del jefe de Bad Robot. Destacable la secuencia del accidente de tren, más parecida al fin del mundo que aun descarrilamiento y lamentable el resultado final de furgoneta responsable del choque…
El eco moralista es gentileza de los tiempos que corren, tan políticamente correctos. Como si los chicos de Manel hubieran revisado el guión.
Y en cuanto al elenco, habrás que esperar para ver si Super 8 se convierte en el trampolín que ya fueron ET o los Goonies para sus actores. Apuestas sobre Elle Fanning? Pinta como intento de una nueva Gwenneth Paltrow.
Aficionada al cine fantástico y de terror.
Creadora y coordinadora del blog Fantascine y codirectora del podcast sobre cine fantástico, ciencia ficción y terror Atmósfera Cero.
Pelicula pretenciosa a más no poder, lo que más me da rabia es que es un calco de ET y que en su día coló sin necesidad de vaselina, pero ah! amigo!, intenta verla 30 años después y verás que te la están metiendo con calzador y es que la infancia es una etapa en la que estamos desprotegidos, da asco ver como se aprovechan de eso.
En fin, que «En ocasiones, comprendo a Lars Von Trier».
Saludos.
¡Vaya tela, compañero! ya veo que no te ha gustado nada de nada. El problema principal de Super8 es que nos la intentaron vender como la creación de un nuevo referente para las nuevas generaciones que podría estar al nivel de Los Goonies, o E.T. y claro, todas aquellas generaciones que quedaron impactadas y de alguna manera «marcadas» por Los Goonies, se decepcionaron porque no pudieron recuperar esa sensación, esa «memoria emocional» que nos dejó el cine de aquella época a muchos de nosotros. ¿El problema cuál es entonces? que la película no es eso, ni tampoco lo pretende por mucho que nos lo hayan vendido así, creo que es una película lo que quiere es servir un homenaje a ese tipo de cine y en particular un homenaje, demasido descarado quizás, a Spielberg y puede que en parte sea también un automenaje del propio J.J. Abrams que se remite a aquella época de su infancia y a aquellas películas que le marcaron y le despertaron la pasión por el cine, sólo hay que reparar en el título de la película «Super 8» y en los protagonistas, unos chavales que tienen una super 8 y que quieren hacer cine, lo del extraterrestre y la aventura que corren sólo es un añadido más a este mensaje que nos lanzá Abrams: amemos el cine, recuperemos la pasión perdida entre tanto blockbuster, remake y secuela. Si fueramos al cine con la mente «más limpia» cómo íbamos en aquella época; sin haber visto imágenes de la película ni ningún traler, sin una campaña publicitaria que despierte tantas expectativas, nos parecería una película bastante correcta, y bastante entrañable, que lo es.